SUDAR MÁS DE LO NORMAL: LA CONEXIÓN ENTRE LA DESHIDRATACIÓN Y LOS ENTRENAMIENTOS INTENSOS

Si alguna vez has estado a mitad de un entrenamiento y, empapado en sudor, has frenado para preguntarte “¿por qué estoy sudando más de lo normal?”, este artículo es para ti. Sudar es la forma natural de tu cuerpo de enfriarse, especialmente durante el ejercicio o en un caluroso día de verano. Pero aquí está el detalle: sudar más de lo normal puede llevar a la deshidratación si no tienes cuidado. ¿La buena noticia? Manejarlo es más fácil de lo que piensas. Vamos a desglosar por qué estás sudando a mares y cómo mantenerte hidratado en el camino.

¿POR QUÉ SUDAS?

Sudar es la manera en la que tu cuerpo previene el sobrecalentamiento. Cuando tu temperatura sube, ya sea por ejercicio o simplemente por estar en el calor, tus glándulas sudoríparas se ponen en marcha, liberando una mezcla de agua y electrolitos. Esto se evapora a través de la piel y te ayuda a enfriarte.

Pero, ¿qué significa cuando sudas mucho? Simplemente significa que tu cuerpo está trabajando duro para autorregularse. Sin embargo, cuando sudas más de lo normal, especialmente durante el ejercicio intenso o en condiciones de calor, la deshidratación puede aparecer.

CAUSAS DEL EXCESO DE SUDOR DURANTE EL EJERCICIO O EL CALOR

Hay varios factores que pueden hacer que sudes más de lo habitual. Aquí tienes la información:

Nivel de condición física

Si estás en forma, tu cuerpo se vuelve más eficiente para enfriarse a través del sudor. Puede parecer contradictorio, pero cuanto más preparado estás, más rápido comienzas a sudar para mantener tu temperatura corporal ideal.

Temperatura y humedad

Cuando hace calor y hay humedad, el sudor no se evapora tan fácilmente, por lo que tu cuerpo tiene que trabajar más para enfriarse. Esto resulta en más sudor simplemente estancado en tu piel, haciendo que te sientas empapado.

Dieta e hidratación

Lo que comes y bebes puede afectar seriamente cuánto sudas. Los alimentos picantes activan el sistema de enfriamiento de tu cuerpo, mientras que la cafeína hace que tus glándulas sudoríparas trabajen horas extras. Pero, si no bebes suficiente agua, tu sudor puede volverse concentrado. Esto significa que puede sentirse más pegajoso, dejar un residuo salado en tu piel e incluso contribuir al mal olor corporal.

Condiciones de salud

Condiciones médicas como la hiperhidrosis pueden causar sudoración excesiva, independientemente de la temperatura o el nivel de actividad. Los cambios hormonales, la ansiedad o el estrés también pueden hacer que sudes más de lo normal

CÓMO MANTENERTE HIDRATADO CUANDO SUDAS DURANTE ENTRENAMIENTOS INTENSOS O CLIMA CALUROSO

Mantenerte hidratado mantiene tu sudor bajo control y tu cuerpo equilibrado. Aquí tienes cómo mantenerte a la delantera:

Bebe mucha agua

Mantenerte hidratado comienza mucho antes de que vayas al gimnasio o salgas al exterior. Haz que sea un hábito beber agua consistentemente a lo largo del día, no solo cuando estás sudando. Tu cuerpo necesita ese suministro constante para mantenerse equilibrado.

Elige bebidas ricas en electrolitos

Cuando tus sesiones de sudor son largas o extra intensas, solo el agua puede ser insuficiente. Tu cuerpo pierde electrolitos vitales a través del sudor, así que opta por bebidas que los repongan, como una bebida deportiva o agua de coco. Ayudarán a mantener tus músculos funcionando correctamente y prevenir la deshidratación.

Evita los diuréticos

La cafeína puede parecer la manera perfecta de comenzar tu mañana, pero puede deshidratarte, especialmente antes de un entrenamiento duro. Por otro lado, el alcohol, aunque es una forma común de relajarse, también actúa como un diurético, aumentando la pérdida de líquidos. Si tienes un día caluroso por delante o planeas hacer ejercicio, es mejor evitar ambos.

Usa ropa ligera y transpirable

Lo que vistes importa cuando estás sudando. Opta por telas ligeras y transpirables que absorban la humedad para ayudarte a mantenerte fresco. Los materiales sintéticos como las mezclas de poliéster o la ropa de rendimiento son excelentes para mantener el sudor fuera de tu piel.

Toma descansos

No dudes en ponerte a la sombra o tomar un descanso en el aire acondicionado durante un entrenamiento sudoroso o una actividad al aire libre. Dale a tu cuerpo la oportunidad de enfriarse y ayudar a regular tu temperatura para prevenir que la deshidratación se cuele.

Sudar más de lo normal es solo el signo de tu cuerpo haciendo lo suyo durante esos entrenamientos intensos o en días de verano abrasadores.

Pero no te preocupes, ¡literalmente! Mantenerte hidratado es la clave para mantener la calma y prevenir la deshidratación. Haz que sea un hábito beber agua a lo largo del día, agrega algunas bebidas ricas en electrolitos para esas sesiones intensas y usa ropa ligera y transpirable. 

Y recuerda: el desodorante es tu mejor amigo, ayudándote a sentirte fresco incluso cuando estás trabajando al máximo.